El Consejo Nacional de Áreas Protegidas con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), a través del proyecto “Asistencia técnica a las partes que reúnen las condiciones para la elaboración del Sexto Informe Nacional del CDB”, presentaron el VI Informe Nacional de Cumplimiento a los Acuerdos del Convenio sobre Diversidad Biológica.
El Consejo Nacional de Áreas Protegidas con el apoyo del Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD), a través del proyecto “Asistencia técnica a las partes que reúnen las condiciones para la elaboración del Sexto Informe Nacional del CDB”, presentaron el VI Informe Nacional de Cumplimiento a los Acuerdos del Convenio sobre Diversidad Biológica.
El sexto informe ha sido elaborado de manera conjunta en colaboración con representantes de pueblos indígenas y comunidades locales, organizaciones de mujeres, la cooperación internacional, el sector gubernamental, ONGs, el sector académico y el sector privado. Este informe muestra un panorama general del estado y las tendencias respecto a la diversidad biológica a nivel nacional, y los modelos más eficientes para su conservación y su uso sostenible, además de brindar información sobre el estado del conocimiento de la diversidad biológica y los principales esfuerzos para su sistematización.
Se presentan y discuten aspectos como el marco político, legal e institucional; programas, iniciativas y proyectos para la gestión; presupuesto y movilización de recursos; atención a las amenazas; género y biodiversidad; aporte de los pueblos indígenas y comunidades locales; evaluación del avance del CDB a través de la evaluación de las metas de Aichi y metas nacionales, entre otros.
Es reconocido que la diversidad biológica y la riqueza cultural del país ha permitido la existencia de importantes fuentes alimenticias con valores nutricionales superiores a especies introducidas de uso más generalizada dentro de la población; sin embargo, las especias nativas son de poco uso debido principalmente a su poco valor social, por lo que es necesario hacer una revalorización de las especies nativas utilizadas en alimentación e incorporarlas en planes de desarrollo con fines de enfrentar los problemas de inseguridad alimentaria que presenta el país
Guatemala ha sido considerado como uno de los países con mayor probabilidad de sufrir catástrofes ambientales, por lo cual los efectos del cambio climático pueden ser desastrosos. El índice global de cambio climático 2017 ubica a Guatemala como uno de los diez países a nivel mundial más afectados por el cambio climático. De ahí la importancia de conservar y utilizar sosteniblemente la diversidad biológica de Guatemala, elemento primordial para la mitigación y adaptación al cambio climático. Aspectos como conservación de bosques naturales, conocimiento y conservación de los recursos genéticos y su conocimiento tradicional asociado, así como actividades de restauración ecológica son primordiales.
Es necesario recalcar que la riqueza en diversidad biológica que tiene Guatemala debe ser conservada, sin olvidar que la misma se tiene que traducir en desarrollo económico y social de nuestro país. Para ello, debe constituirse en un eje de desarrollo sostenible, acción que requiere una decisión política para que cuente con todo el apoyo desde gobierno para su implementación. Estamos conscientes que desde CONAP, como institución responsable de la diversidad biológica de Guatemala, es un reto inmediato, el cual debe alcanzarse con el apoyo de otras instituciones de gobierno, iniciativa privada, academia, pueblos indígenas, ONGS, comunidades locales y todos aquellos sectores relacionados con el tema de biodiversidad y desarrollo.
El CONAP en coordinación con el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) y con el apoyo financiero del Fondo para el Medio Ambiente Mundial (GEF por sus siglas en inglés), presenta los avances alcanzados como país en cuanto a implementación del CDB en Guatemala durante el periodo 2014 a 2018.